Ánimo Alzheimer: sigo siendo yo
Llevas varios años echándonos un pulso desde aquel momento en el que las lentejas se quedaron pegadas en el cazo y estaban puestas en el fuego. Fue nuestra alerta de que algo no iba bien, después vinieron las llamadas por teléfono de cómo era el sofrito de los macarrones que si le echábamos cebolla o simplemente era con ajo.